Cuando notamos un dolor agudo todos sabemos que debemos buscar consejo o auxilio porque algo grave puede estar pasando en nuestro cuerpo. Si esto se perpetúa durante mucho tiempo el hombre tiene tendencia a producir una especie de memoria de este dolor y nuestro sistema nervioso central tiene un recuerdo continuado de este dolor.
Si durante 3 - 6 meses o más tiempo hay un dolor persistente en el cuerpo se produce lo que llamamos un dolor crónico o un dolor cronificado que es una enfermedad en sí mismo, una enfermedad que cursa con alteraciones del humor, alteraciones en el sueño, alteraciones en las relaciones sociales, etc… se convierte pues en un problema biopsico-social difícil, muy difícil de tratar. De ahí la importancia de acudir a las unidades de dolor agudo, dolor crónico, para tratar adecuadamente todos estos problemas.
El tratamiento del dolor crónico se basa esencialmente en 3 patas. Una sería la psicoterapia. La relación médico - paciente se establece entre el médico de la unidad del dolor y el paciente. Luego tenemos los fármacos más o menos potentes, opiaceos más o menos potentes, que también son útiles para producir una disminución en la memo-ria de este dolor crónico que está produciendo estas alteraciones en el paciente. Y finalmente tenemos toda una batería de infiltraciones, bloqueos, a nivel de la espalda o de diferentes partes del cuerpo, que realizados en quirófano por personal experto pro-curan muchas veces una disminución del dolor, una disminución de las sensaciones y del malestar crónico de estos pacientes.
Cuando notamos un dolor agudo todos sabemos que debemos buscar consejo o auxilio porque algo grave puede estar pasando en nuestro cuerpo. Si esto se perpetúa durante mucho tiempo el hombre tiene tendencia a producir una especie de memoria de este dolor y nuestro sistema nervioso central tiene un recuerdo continuado de este dolor.
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